martes, 31 de julio de 2007

BRITNEY SPEARS: VÍCTIMA DEL CAPITALISMO Y DE SU CODICIA.


Completamente seguro de la certeza de no sentir motivación para reflexionar más de este mundo y llevar además al papel dichos procesos mentales, me siento con el imperioso deber de comunicarles un suceso que me tiene un poco preocupado y que en términos generales se difunde y percibe socialmente como un hecho meramente superficial.

Como mencionaba anteriormente, la percepción social de ciertos fenómenos, errada en su génesis y en su traspaso simbólico contractual, despierta en mi ciertas y preocupantes aprehensiones respecto de las nefastas consecuencias que ha generado, genera y generará la instalación a ultranza y ejercicio definitivo del “Desenfrenado e Inhumano Capitalismo Norteamericano”.

Sin lugar a dudas y con la seguridad de no temer a equivocarme, puedo asegurar que el Capitalismo es una “forma de ordenamiento social, económico, cultural y político”, mediante el cual el Mercado de Capitales juega un rol fundamental en la generación y distribución de la riqueza en los países. En este ámbito, el Estado cumple una función inferior respecto de los procesos de distribución de riqueza, ya que ha perdido legitimidad en la medida que ha privatizado sus servicios públicos sin la menor de las consideraciones.

Como “forma de ordenamiento”, el Capitalismo también influye categóricamente en la conducta subjetiva y objetiva de las personas. Moldea nuestro comportamiento conforme a su conveniencia. Potencia esencialmente la “meta-valor éxito económico” por sobre todas las cosas y entrega pautas y/o mecanismos formales e informales para alcanzar esa dicha “meta-valor éxito económico”. Todos quieren tener dinero y en grandes cantidades. Algunos se esfuerzan demasiado por obtenerlo y otros no tanto. El sistema premia y/o castiga. Premia a unos pocos y nos castiga a la mayoría.

Existen diversas formas de lograr este “éxito económico”: individualmente y de forma colectiva. Personalmente mediante el esfuerzo físico y mental una persona puede lograr el éxito económico. Se instruye académicamente o desarrolla y practica alguna “disciplina”. Es el caso de quienes se instruyen en la universidad o centro de estudios y luego ejercen lo aprendido: una enfermera, una secretaria, un profesor, un asistente social, un médico, un ingeniero calculista, un dibujante técnico, entre muchas otras alternativas. También quienes desarrollan y practican un deporte, danza o disciplina artística.

De forma colectiva existen las empresas, quienes generan grandes cantidades de capitales, y sin embargo están en manos de unos pocos, por lo que sus ganancias se concentran en ellos.

Existen además quienes de forma personal no pueden lograr ese anhelado “éxito económico”, por lo cual acceden a asociarse con otros para alcanzar su fin.

Ahora, ustedes queridas y queridos amigos se preguntarán ¿Qué tiene que ver Britney Spears en todo esto?

Mucho! Ella es el ejemplo más claro y evidente de lo que trato de describir!

Siempre he dicho que ella es producto de la maquinación ambiciosa de personas que buscan dinero de forma fácil. Ella muy ingenua cae en esta trampa. Sin talento alguno y cómplice además de una gran falacia y falsedad se ha convertido en un ícono de lo que se conoce como “Artistas de Probeta”. Detrás de ella hay mucha gente que vive de su falso talento y que se llenan los bolsillos con ganancias provenientes de todas y todos nosotros. Han logrado una imagen perfectamente repugnante. Le han quitado su identidad e incluso le han robado una importante etapa de su vida.

Sin embargo, ella se deja llevar ante la ambición y lujuria. Tiene todo lo que quiere. Ha logrado la “meta-valor éxito económico” mediante una conspiración mercantil que a mi parecer produjo dos efectos nocivos para nuestra humanidad.

En primer lugar ha causado un daño inconmensurable a la música y por otro lado solidifica las prácticas capitalistas.

¿Resultado de todo esto? Britney Spears calva, adicta y con intentos reiterados de suicidio. ¿Quiénes son los y las culpables? Todos y todas quienes ingenuamente creen que ella es una cantante, adquieren sus discos, bailan sus coreografías y la han elevado lamentablemente al nivel de artistas como Madonna, Abba, Carpenters, Rolling Stones, U2 y otros más. Ha sido comparada injustamente con ellos, artistas de verdad.

Se acabó el “reinado” de la “diva”, quien al final será recordada como una Marilyn Monroe: rubia? artista talentosa? Pero de todas formas, falsa.

Un último detalle: “La Presidente de todas y todos los chilenos” ha firmado un Tratado de Comercio con Japón. Cuidado con las nuevas Britney´s Spears de ojos rasgados que se avecinan!!!!