martes, 12 de febrero de 2008

¡Gracias Amigos y Amigas! Mi Cumpleaños Fue Muy Feliz.


Dedicado a todos mis amigos y amigas.


En gran parte la felicidad en mi vida tiene que ver con ustedes y con el aporte brindado para mantener mi esencia y en cierto sentido lo que soy y se espera que sea.

Me han ayudado a vencer miedos, a superar dificultades y sobre todo a ser una mejor persona. Me reiteran una y otra vez “no te compliques y vive la vida”. Sin embargo mi porfía me juega en contra.

A pesar de eso, ustedes continúan a mi lado. Soportando cuanta estupidez y barbaridad me motiva. Han sido testigos de mis espectaculares sueños. También cómplices de la concreción de más de alguno de ellos. Me han dado su apoyo en mis grandes frustraciones. Han secado mis lágrimas en muchas ocasiones.

Ahora que ya soy una persona grande y segura de sí misma, confirmo mucho más mis convicciones, las cuales no serían tales si no es a partir de su invalorable amistad.

Muchas Gracias.


Mi Necesidad de Dormir para Siempre.


Obviamente que necesito dormir para descansar. Aunque cueste una millonada de parafernalias para conciliar mi sueño, siempre lo busco y trato de acomodarme a las más singulares formas para lograrlo.


Antes de dormir siempre realizo una “cadena de rituales” para introducirme en este misterioso mundo. A menos que esté ebrio o sedado puedo obviar tales precedentes. De no ser así debo por lo menos despedirme de mi madre como cinco veces; fumar un cigarrillo o un puro; beber una taza de té; comer una fruta; jugar con mi gato; ordenar mi ropa para el día siguiente; leer mi libro de cabecera; ver los noticiarios y orinar. Sólo de esta forma puedo relajarme y por ende conciliar mi sueño. En parte explica el por qué no puedo dormir en otros lugares y camas.

Dormir me embelesa y place mucho. Me gusta sentir que duermo de forma plácida y sin la maldita preocupación que debo levantarme temprano. Si el fin de semana, estando en mi hogar, me despiertan temprano será un mal día seguramente. Primero porque perdí la oportunidad para dormir más y segundo porque tendré que recuperar lo no dormido durante una siesta que durará por lo menos 4 horas. En esos instantes mejor no hablarme ni dirigir palabra alguna. Menos llamarme por teléfono.

Yo tengo dos amigos ficticios. Uno se denomina “sueño” y el otro simplemente “insomnio”. Ambos siempre quieren estar presentes durante mi vida cotidiana, pero hay uno que triunfa y desplaza al otro.

Ejemplifiquemos. Cuando estaba en la universidad y necesitaba estudiar toda la noche bebía cantidades impresionantes de café para que “insomnio” derrotara a “sueño” y de ese modo estudiar concentradamente. Pero, muchas veces me sucedió que estando en plena prueba, “insomnio” es vencido por “sueño” y sin más explicaciones me quedaba dormido.

En otras instancias, en las cuales se presenta el estrés, la tristeza, la amargura, la nostalgia y la apatía social, mi amigo “insomnio” aniquila a “sueño”. Resulta entonces que no puedo dormir por largos periodos. Simplemente debo asistir al médico para que confirme una vez más mi crónica depresión y me recete algún medicamento y licencia de un mes como mínimo.

Mi última experiencia depresiva me obligó a dormir periodos amplios. Soñé muchas cosas. Ninguna de ellas terroríficas o hastías que me obligasen a despertar y volver al mundo real. De ese modo, esperaba ansiosamente la noche para dormir y soñar plácida y serenamente.

Hay una canción de Emmanuel que me ayuda a explicar lo que pienso y plasmo en este artículo:

“Durmiendo vivir durmiendo, Soñando vivir soñando”
(Emmanuel. Quiero Dormir Cansado. Íntimamente. 1980)


Al parecer genéticamente tengo una programación para dormir en exceso. Mis hermanos también son muy buenos para dormir, aunque mi padre y mi madre no lo sean, se duermen hasta en la cena.

En resumen, puedo afirmar que dormir me evade de la realidad. Es la única manera de lograrlo y es el por qué muchas veces prefiero dormir que ver televisión, ir a una fiesta o salir a hacer vida social.

Ahora entrego brevemente algunas razones mucho más prácticas y menos idealistas de mi necesidad de dormir siempre.
Dormir Siempre Significa que:

- No existe el tiempo. Cuando sueño jamás existe la cronología. No hay relojes y menos sé si es día o noche. Sólo existe el presente y todo se desarrolla en un “aquí y ahora”.

- Puedes hacer ciertas cosas que son imposibles en el mundo real. Por mencionar algunas, en mis sueños he abrazado a Isabel Allende, he conversado con Miguel Bosé y he asistido a un concierto de Madonna en primera fila. Una vez soñé que volaba y en otra ocasión que corría por la selva para librarme de dinosaurios. Todos hemos tenido “sueños húmedos”, así que nos los describiré.
No Dormir Siempre Significa que:
- Debes tener preocupaciones. Por culpa del maldito empleo, de los problemas familiares, del mundo en general y de “tanta mierda que se ve a diario” tu colon te “pasa la cuenta”. Tantas preocupaciones uno tiene que es imposible librarse de ellas. Tratas de dormir y es imposible por tus preocupaciones, luego no quieres levantarte de la cama porque simplemente no quieres enfrentarlas.

- Hay tiempo para reflexionar de tu alrededor. Quienes pensamos y reflexionamos mucho somos más depresivos. Todo se resume en eso.

- Hay tiempo para reflexionar de ti mismo. Te convences, te desilusionas y así sucesivamente. Ya no sabes quien eres ni de donde vienes, ni menos donde vas. Te cuestionas si tienes o no una misión que cumplir en este mundo. Incluso lees cosas como metafísica y de tipo oriental. Te vuelves ateo, te vuelves protestante o te apegas a una nueva religión. Creo que eso es muy complicado y bastante subjetivo. Mejor no ahondar.

- Siempre quieres dormir. Como única y real herramienta para evadir esta “puta realidad”. Mucho mejor que cualquier trago en exceso o droga alucinógena.

Conforme a todo lo expuesto, prefiero dormir para siempre. Eso sí, de vez en cuando quisiera despertar.

Ricardo Lagos Weber es un Estúpido. Caso Típico de lo que es el “Pituto Chileno”. ¿Si no lo Digo Yo, Entonces Quién?


Alguien que haya conocido a Ricardo Lagos Weber antes de ser un flamante Ministro, que me lo indique claramente. Yo jamás lo había escuchado mencionar.

Ricardo Lagos Weber responde a lo que se denomina “cuoteo político” y es también el típico caso del hijo que no tiene el intelecto, los medios necesarios y la praxis para asentarse y destacarse en lo laboral.

¡Así es! Precisó de la ayuda de su padre Ricardo Lagos Escobar, nuestro ex Presidente, quien fue catalogado por los medios de comunicación como el “soberano con mayor aprobación del pueblo”. Una vez más nos “meten el dedo en la boca”. Sus “cagazos, robos y falsedades” han florecido por doquier.

Pero antes, es importante enunciar que este tipo de práctica corrupta no se legitima por sí sola, precisa a la vez de una contraparte. En este caso, es ni más ni menos que nuestra “Presidenta de todos los chilenos y chilenas”. ¡Claro está! Ella tenía trabajo como Ministra en el Gobierno de Lagos, ahora ella debe “devolver la mano a su cómplice”.

El resultado de todo esto: “Ricardo Lagos Weber fue Ministro y se dio a conocer como tal. Ahora pretende ser Senador. Probablemente lo será. El circuito corrupto se cumple a cabalidad”.

Sin embargo, algo de tranquilidad me genera, ya que el personaje en cuestión será más recordado por su “epiléptica verborrea y denigrante manera de bailar cueca”.

Recuperando a mi Hermano.

Dedicado a mi Amigo César.
Aunque no lo creas, esperaba el día que volvieras a nuestro lado. Sin importar la forma y el motivo. Sin importar el famoso “qué dirán”.

Amigo, ¿Recuerdas que siendo niños, junto a Miguel, nos prometimos ser hermanos? Yo era el hermano mayor, Miguel el del medio y tú el hermano menor. Siempre fue de ese modo. Siempre lo ha sido y lo será. Lo afirmo sin temor a equivocarme.

Una vez más reafirmamos nuestro vínculo de amistad y fraternidad. Hemos vuelto a reírnos recordando viejos tiempos. También proyectándonos con más sabiduría y madurez emocional. Sin embargo, nuestra “esencia de niño” continúa y determina enormemente nuestro futuro.

Gracias por confiar en nosotros. Gracias por confiar en mi.
Tu valentía es envidiable.


A un Año del Gran Proyecto. Nada que Celebrar. Señora Michelle Bachelet: ¿Ha Tenido el Agrado de Viajar en Transantiago?


7 meses han transcurrido de la publicación de mi artículo “Juan Carlos y el Transantiago. Una experiencia llena de recuerdos, resentimientos y amargura”.

12 meses o un año ha transcurrido de la inauguración del Gran Proyecto de Transporte Urbano denominado “Transantiago”.

Son 12 meses o un año caracterizado por el más completo e inhumano de los caos urbanos. El más indigno y desfachatado proyecto jamás creado por la Concertación de los Partidos de la Democracia.

El negocio mejor elaborado por los empresarios del transporte público, quienes son los únicos beneficiados con tanta parafernalia y discurso político. El Metro de Santiago saca cuentas extremadamente favorables.

¡Y era muy obvio! Nuestra despreciable y fascista Alianza por Chile ha sacado sus garras, utilizando a la gente pobre para generar más conmoción en las masas enajenadas.

Tan estúpidos y mal intencionados son que han sido capaces de utilizar a las famosas “micros amarillas” para defender sus pacatas ideas. Las “micros amarillas”, aquellas en las cuales me ofendieron y violaron mis derechos sólo por ser escolar y pagar 100 pesos.

Ahora yo me formulo la siguiente pregunta: Señora Michelle Bachelet, ¿Ha tenido el agrado de viajar en Transantiago? La respuesta es obvia. De haberlo hecho aplicaría un valor central de sus ideales socialistas que pregona: la empatía.

Sra. Presidenta: ¿Sabe usted que hay gente de escasos recursos que debe gastar más recursos para movilizarse a sus empleos? ¿Sabe usted que el costo de la vida sube y los sueldos no? ¿Sabe usted cuál es el valor de un kilo de pan?

La respuesta es obvia. Ni idea debe tener. De lo contrario estos malestares sociales no tendrían cabida en nuestro país. Sin embargo usted se legitima por su pertenencia a un Partido Político denominado Socialista, el cual no tiene nada de Socialista.

Así como usted hay miles de malandrines y malandrinas esperando la ocasión para tomar un trozo de torta y tragársela lo más rápido posible para comer más. Pero, también hay quienes tenemos derecho a disfrutar del pastel.